Lo más probable es que la madre no logre, ni siquiera, experimentar las náuseas matutinas comunes durante el embarazo.
Beber Agua Alcalina Kangen proporciona las reservas de alcalinidad suficientes que una mujer embarazada necesita para asegurar tanto la salud de su bebé como la suya propia durante el embarazo.
Para evitar las náuseas y promover el desarrollo de un bebé sano, la madre ha de consumir cada día una gran cantidad de agua Alcalina Kangen, tanto antes como durante la gestación.
Durante la etapa inicial del embarazo, el cuerpo de la madre pierde una gran cantidad de minerales alcalinos. Estos minerales son aportados por la madre para la construcción de la placenta y para neutralizar los ácidos vertidos por el feto en su interior, durante los nueve meses de gestación. Esta extraordinaria necesidad de alcalinidad se produce mientras la madre duerme. La recolección de estos minerales alcalinos tiene como resultado un aumento de la acidez en el cuerpo de la mujer, dando lugar a las comunes náuseas matutinas.
El cuerpo de una mujer embarazada, en primer lugar, localiza y consume las reservas alcalinas que están disponibles dentro de su organismo. Si se cuenta con las reservas suficientes para responder a las exigencias alcalinas de la placenta, el organismo no tendrá que buscar en otra parte del cuerpo, tales como los dientes o huesos, para adquirir estos minerales alcalinos.
Con las reservas alcalinas adecuadas (es decir, una gran cantidad de suministros de minerales alcalinos, en forma de tampón en la sangre), lo más probable es que la madre no logre, ni siquiera, experimentar las náuseas matutinas comunes durante el embarazo. Además, el cuerpo seguirá utilizando estas reservas para neutralizar los vertidos ácidos que provienen del bebé durante los meses de gestación.